Seúl, feb 17 (SF).- Corea del Sur y EE.UU. intensificaron hoy su presión a Corea del Norte al desplegar cuatro nuevos cazas y prohibir los intercambios civiles, como respuesta a la prueba nuclear y el lanzamiento de un cohete espacial del régimen de Kim Jong-un.
[quote_box_center]Escoltados por ocho cazas estadounidenses y surcoreanos, los F-22 aterrizaron este miércoles en la base aérea de Osan, cerca de Pyeongtaek, a 70 kilómetros al sur de la frontera con Corea del Norte.[/quote_box_center]
En un entrenamiento conjunto en el que los aliados demostraron su “capacidad para aplastar cualquier provocación imprudente del enemigo”, según expresó la Fuerza Aérea surcoreana.

[quote_box_center]Estos cazas furtivos, que no son detectados por los radares, están normalmente estacionados en Okinawa, en el sur de Japón. Se desconoce cuándo tiempo permanecerán en Corea del Sur.[/quote_box_center]
Nunca antes EE.UU. había desplegado en Corea del Sur cuatro unidades del F-22, un avión de quinta generación que ocupa un papel principal en la Fuerza Aérea del Pentágono, lo que refleja la gravedad de la situación en la península coreana.
[quote_box_center]Corea del Norte realizó el 6 de enero su cuarto ensayo nuclear y el 7 de febrero envió un satélite al espacio, lo que la comunidad internacional considera una prueba encubierta ilegal de misiles de largo alcance.[/quote_box_center]